Llega un momento en la vida en que es hora de pensar un poco en nosotros, en quienes somos, quienes fuimos, quienes queremos ser. Olvidar esas tonterías de niños, olvidarla. Es momento de mirar adelante y tomar cartas en el asunto. Decisiones radicales, de aquellas que no tienen marcha atrás.
Voy a pintar el living.